miércoles, 28 de octubre de 2009

De 'La Terremoto', al terremoto de Alcorcón




Ni en la peor de sus pesadillas, el aficionado madridista podía imaginarse una imagen tan dantesca y patética de su equipo: baño y goleada (4-0) de un Segunda B, el Alcorcón, a todo un elenco de estrellas que componen la mal llamada ‘Galaxia blanca’. Lo de mal llamada, no lo digo porque al creador de este apelativo le faltara inspiración en su momento, sino, más bien, por la propia falta de calidad y profesionalidad de unos jugadores multimillonarios en el banco y pobres dentro del terreno de juego.

Esto puede parecer un análisis oportunista tras lo ocurrido ayer, pero el enfermo lleva con los mismos síntomas desde que el mejor calvo de la historia del fútbol dejó de pisar el césped del Bernabéu. Y ya han pasado casi cuatro años. Toda una legislatura, donde el Madrid se ha gastado una cantidad desorbitada en fichajes que, a la postre, no ha dado sus frutos; se ha asistido a una de las páginas más negras del madridismo con el ‘affaire’ Calderón; y se ha visto cómo el Barça se hacía cada vez más fuerte, hasta convertirse en tricampeón.

Mientras tanto, los jugadores andan perdidos sobre el césped: los delanteros no presionan, la defensa recula demasiado y hace que el equipo se divida en dos, se recupera la posesión muy lejos de la portería rival y no existen movimientos sin balón. Todo ello se resume en dos conceptos: actitud y concentración. No creo que Pellegrini tenga mucha culpa de esto; si culpamos al chileno, tenemos que hacerlo con los nueve entrenadores que han desfilado, y no precisamente por Cibeles (válgame la coña), desde que en 2003 se prescindiera de Del Bosque. Todos ellos de primerísimo nivel, por cierto.

El problema es otro. Algo raro tiene que pasar dentro de ese vestuario para que los mejores futbolistas del mundo no rindan al nivel que se les espera. No obstante, lo más grave es que el capitán diga públicamente, después de haber hecho el ridículo, que el Madrid es el equipo de las remontadas. No se equivoquen: un 5-0 en la vuelta no soluciona los males de este equipo. La satisfacción del buen madridista es identificarse con un estilo de juego y ver que sus multimillonarios ídolos juegan como las agujas de un reloj.

Ni la mismísima ‘Terremoto de Alcorcón’ hubiera provocado un seísmo de tal magnitud con sus excéntricas actuaciones. Y es que la noche de ayer será recordada por el terremoto, de grado 4-0 en la escala ‘Florentiniana’, que se produjo en la ‘Casa blanca’. La noche del terremoto de Alcorcón.

4 comentarios:

Pablerra dijo...

¡Hola! Aquí es donde tenéis que 'pinchar' para poder opinar.

¡Un saludo!

José Antonio Montiel Tosso dijo...

No me lo podía creer, iba conduciendo a casa y ya había empezado el partido, y de pronto empiezan a caer los goles. Cuando aparco, 2 - 0 y casi acaba la primera parte. Cuando enciendo la radio, ya en casa, descanso y 3 - 0. Seguía sin creerlo.
Comienza la segunda parte y pronto el 4 - 0, dejo de oir la radio. Cuando acabo de cenar, ya ha terminado el partidazo del Alcorcón y el ridículo madridista.
No doy fe de que ni siquiera hayamos sido capaces de meter un goooool. Horroroso.
¿A cuántos equipos de 2º B le va a meter 4 goles el Alcorcón?
Esto es intolerable. El fútbol de élite es un pluf o un bluf o una mierda con perdón, porque no se sostiene que un equipo de 2ªB normalito le haga un traje de etiqueta a todo un nuevo real madrid ultragaláctico. Es de risa. El presupuesto del Alcorcón cabe en la cuenta corriente del jugador que cobre menos en el madrid. De risa y de pena.
Pocas veces me he sentido tan decepcionado con el equipo y con laq dirección ténica. Es cierto, pues no hay patrón de juego. Se juega a impulsos, pero el equipo va para atrás. No ha avanzado nada desde los bolos de julio. Increíble.
¿Cuántos técnicos tiene el madrid?
¿Nadie puede ayudar al ingeniero?
Es penoso ver cómo hay una total dependencia de Cristiano. Ni siquiera con el otro Ronaldo en su primer año fue así. Ni siquiera Messi en el Barça. Esto del madrid es indignante. Creo que ha tocado fondo el señor de Chile.
Saludos y hasta pronto.

Carlos Álvarez dijo...

Todo proyecto debe ir poco a poco cimentando sus bases. Es verdad que éste Madrid se ha gastado una pasta gansa y la presión es mucho mayor y que mínimo que luchar y demostrar el equipo que es ya sea ante un primera o un segunda B.

Lo vivido en Alcorcón es una vergüenza pero hay que darle tiempo aunque la derrota por 4 - 0 y el baño es de las derrotas que dejan huella. Pasó con la final de Copa ante el Zaragoza ante un madrid de Queiroz intratable. Pasó en la final de Copa del Centenariazo, le pasó ante el Arsenal de Henry y el año pasado ante un Barcelona insuperable. Lo de Alcorcón supera cualquiera de las derrotas anteriores. ¿La ventaja? Que ésto acaba de empezar y la derrota ha venido en el mes de Octubre, donde al menos, hay margen de mejora.

La derrota del Madrid es como si un top ten del Tenis perdiese ante el número 233 del mundo ( Y ha pasado ) Es como si Minardi entrara en los puntos del campeonato del mundo de F1 antes que los Ferraris ( Y ha pasado ). Es como si Angola de baloncesto le ganara a España ( ya pasó ) Tampoco nos llevemos las manos a la cabeza, porque el deporte es así. Y por eso, simplemente, me encanta.

Pablerra dijo...

Entre José Antonio y el Bello han dado las claves de la sorprendísima e inesperada derrota del Madrid en Alcorcón.

Es cierto que un equipo que vale tantos millones de euros no puede perder de esa manera frente a un Segunda B, con todos mis respetos para el Alcorcón.

Por otro lado, como bien apunta el Bello, estas hazañas deportivas se dan, se han dado y se darán siempre. De vez en cuando, una cura de humildad es necesaria para seguir adelante y saber que no son intocables.

No obstante, no responsabilizo a Pellegrini a propósito de que el equipo no juegue bien y, mucho menos, de la derrota en Copa. Son los jugadores, sin necesidad de tácticas e historias, los que tenían que ganar el partido por vergüenza torera... y por calidad, claro está.

El ejemplo lo tuvimos ayer frente al Getafe: una hora con un jugador menos y el Madrid ganó 2-0. Por cierto, hubo un cambio táctico tras la expulsión y el equipo empezó a funcionar mejor: Arbeloa, al lateral derecho; y Sergio Ramos, al centro de la zaga. Soy de los que piensa que el de Camas debe jugar en la posición de central.