Maicon rescata del atasco a Brasil

Brasil 2-1 Corea del Norte

Discreto partido de los de Dunga ante un equipo de aficionados que ha caído dignamente ante la pentacampeona del mundo. La defensa al hombre de los asiáticos fue efectiva durante los primeros 45 minutos pero, tras la reanudación, el lateral derecho del Inter se inventó un golazo, al estilo Roberto Carlos, que sacó del atolladero a la canarinha. Elano consiguió el segundo tanto después de culminar un gran pase de Robinho. Cuando todo parecía terminado, Corea del Norte, que ha sorprendido a propios y extraños, acortó distancias, aunque ya era demasiado tarde. Con esta actuación, los coreanos se han ganado la simpatía de los espectadores.

Brasil

Lo mejor: la calidad individual de cualquiera de sus hombres, que puede salir a relucir en el momento menos esperado. No hace falta que juegue bien para ganar. La seguridad de su portero, Julio César, quita presión a su línea defensiva. Son los reyes del contragolpe. Los dos centrales, Lucio y Juan, tienen mucho peligro por alto en jugadas a balón parado.

Lo peor: la espesura de su juego en ciertas fases del partido. El doble pivote en el centro del campo ahoga al equipo cuando se enfrenta a rivales que se encierran atrás. Luis Fabiano juega muy solo en punta de ataque.

Corea del Norte

Lo mejor: sobresaliente encuentro de los coreanos, teniendo en cuenta sus grandes limitaciones. La defensa al hombre es tan antigua como efectiva ha sido esta noche. El físico es su gran aval. El delantero centro, Tae Se, ha cuajado una actuación notable, ofreciendo una gran variedad de movimientos en ataque.

Lo peor: es la Cenicienta del Mundial. Sus integrantes no se dedican al fútbol profesional, con esto se dice todo. Su portero no ha estado a la altura de sus compañeros.

El crack: Maicon

(3 puntos)

Tae Se (Cor) 2 puntos

Bastos (Bra) 2 puntos

Yun Nam (Cor) 2 puntos

El vuvuzelazo: Myong Guk

Quizás no sea justo que el portero coreano se lleve este premio, porque todos los integrantes de la expedición asiática deben estar orgullosos de su actuación esta noche. Sin embargo, Myong Guk no ha rayado al mismo nivel que sus compañeros, como se pudo comprobar en el primer gol de Brasil, que si bien ha sido una obra de arte, un guardameta siempre tiene que cubrir su palo. Tampoco se le puede pedir grandes cosas a estos jugadores pero, en un torneo de esta magnitud, los errores se pagan muy caro.