El más difícil todavía: Ganar sin Pau

Pablo Núñez

La selección española de baloncesto defiende su condición de mejor equipo del mundo en Turquía a partir del próximo 28 de agosto. Una nueva aventura para los chicos de Scariolo que, tras ganar el Eurobasket y la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Pekín, buscan alargar aún más la leyenda de La Roja revalidando el título que consiguieron hace cuatro años.

Juan Carlos Navarro será el líder de España.

España presenta la mejor escuadra de la competición, dado el individualismo del combinado norteamericano que, además, acude a la cita mundialista sin los mejores. Sin aquel equipo temible que volvió a morder el oro después de varios años de sequía, aunque para ello tuviera que sufrir a 12 gladiadores rojos, ese día blancos, que realizaron el mejor partido de la historia de nuestro baloncesto.

Pero la empresa no va a ser fácil. Nuestra estrella, Pau Gasol, se queda en casa, y con él, gran parte de las opciones de volver a hacer algo importante porque el de Sant Boi es único, insustituible, una especie en extinción, no sólo para La Roja, sino para los Lakers, que ya es decir.

Tampoco debemos ser pesimistas, ya que nuestra mayor virtud es el bloque y ahí están los Navarro, Ricky, Rudy, Marc, Felipe, Garbo... Sin Pau, estos ‘jugones’ tendrán más protagonismo sobre el parqué y, junto a la envergadura de Fran Vázquez, intentarán algo imposible, otra machada más en la larga lista de éxitos de esta insuperable generación: sustituir al bicampeón de la NBA y, por ende, al jugador más grande que ha dado este país. Si lo conseguimos, ya podremos decir que somos ‘el equipo’.

Estados Unidos

Los norteamericanos basan su juego en el contragolpe y la rapidez, por eso, los técnicos han decidido quedarse con un sólo pívot nato, Tyson Chandler, intimidador, pero parco a la hora de anotar. Sin lugar a dudas, Kevin Durant será el auténtico pilar de este equipo, mientras que tres hombres expertos en finales NBA, Lamar Odom, Rajon Rondo y Chauncey Billups, aportarán veteranía a un combinado que no consigue el oro desde 1994.

Serbia

La nueva generación serbia, con Milos Teodosic a la cabeza, dejó su carta de presentación en el Eurobasket de Polonia y ahora es el momento de demostrar que no iba de farol. Juventud, agresividad en defensa y calidad técnica son las características de un equipo que se postula como dominador de este deporte en los próximos años, con permiso de los norteamericanos.

Argentina

Junto con España, es la selección que menos cambios presenta. Pasan los años y la albiceleste sigue en lo más alto del baloncesto mundial, gracias, sobre todo, a Luis Scola y Carlos Delfino, que llevan el peso anotador de este equipo. El resto, grandes jugadores todos, completa un bloque que basa su juego en la experiencia, la garra y el espíritu competitivo, que lo convierten en favorito al título. Y eso que se queda en casa su mejor hombre: Manu Ginóbili.

Brasil

Los brasileños no llegan como favoritos al torneo, pero esperan hacer un buen papel y presentarse en semifinales. Para ello, el técnico argentino, Rubén Magnano, cuenta con cuatro figuras NBA: Leandrinho Barbosa, Nené Hilario, Anderson Varejao y Tiago Splitter, que se marcha este año a San Antonio. Su juego interior es extraordinario, quizás el mejor del campeonato, aunque algunas de sus estrellas no acuden a la cita en un estado de forma óptimo.